La cuestión de la violencia es de candente actualidad. De forma asidua vemos circular en las redes sociales, en la escuela, en los lugares de ocio, una violencia expresa difundida desde diversos soportes audiovisuales, tomando en ocasiones la dimensión de una experiencia de entretenimiento que nos convoca a preguntarnos por este fenómeno que viene a introducir un elemento perturbador en el lazo social.
Tanto Freud como Lacan desentrañaron una pulsión agresiva constituyente en el ser hablante que introduce la agresión, la rivalidad y la ambivalencia en toda relación humana siempre contenida por ciertas barreras civilizadoras. Por otra parte, nos preguntamos en qué consiste la violencia ¿Es la irrupción pura de la pulsión de muerte, o de un goce en lo real? ¿Es una violencia sin frase, es simbolizada o simbolizable? Tal como lo indica J. -A. Miller, la violencia puede ser simbólica, imaginaria y real, y en todos los casos traduce una rasgadura en la trama simbólica del sujeto ya sea puntiforme o extendida.
¿Cómo diferenciar entonces la agresividad constituyente de la instancia yoica, que tiene como consecuencia la rivalidad con el semejante, de la violencia que se manifiesta ante todo en relación al acto? ¿Cómo se presentan ambas cuestiones hoy en los niños y los jóvenes? ¿Qué habría de nuevo, en caso de haberlo, en este momento?
Estas cuestiones son las que guiarán nuestro trabajo en el Departamento en el curso 2025-26. Os invitamos a acompañarnos en esta nueva apuesta desde el psicoanálisis de orientación lacaniana.